viernes, 18 de julio de 2008

Una Carta Prosaíca

Amada mía:

Estaba yo sentado esperando a que llegue mi destino, en ese momento me doy cuenta de uno olor tan agradable y buscando a la persona que oliera así me encontre con unos ojos, unos ojos que me hipnotizaron desde el primer momento en que los mire fijamente, entonces observe de quien eran esos ojos que me hipnotizaron por unos momentos y esos momentos se volvieron una eternidad, por lo que me sigue hipnotizando tu preciosa mirada y de quien son esos hermosos ojos y esa preciosas mirada, pues me di cuenta que son de una niña que irradia una beldad extrema que sólo puede ser comparada con la belleza de una deidad. Entonces esos ojos pertenecen a una niña de beldad extrema, sin saber y sin temer de nada me fije en sus labios esos labios que regalan una sonrisa a quien se cruce en su camino y afortunadamente en esta ocasión me sonrio a mi. Yo sin saber nada que hacer, toda mi vida he vivido en una soledad infita que al observar esos hermosos ojos, esa preciosa mirada, esa beldad y su sonrisa que me dejo cautivado en unos segundos. Y no solamente cautivado, sin también enamorado. Día con día espero volver a ver esos hermosos ojos, esa preciosa mirada, su beldad infinita, su sonrisa cautivadora al igual que espero día con día oler su perfume de mujer que me ha facinado. No quiero parecer egoísta pero sólo quiero que tus hermosos ojos esten mirando los mios, con esa preciosa mirada cruzandose con la mia. Y es que siento como se derrumba mi almacuando tu no estas, pero al recordar tus hermosos ojos, tu preciosa mirada ,tu beldad infinita, tu sonrisa cautivadora, tus labios y esa voz que no me la puedo y ni quiero sacarmela de la mente. Ahora que sabas que tanto te amo, que tanto admiro tu bellezay que tanto daría porit, me gustaría compartir años de mi vida oyendo tu voz en mis oídos y mirarnos fijamente, es lo único que quiero en esta vida. Que gracias al destino te cruzaste en mi camino y le has dado felicidad a mi soledad infinita. Espero que con esto no te hay ofendido sino al contrario alagado a tu belleza de mujer, aunque para mi siguessiendo una niña con esa inocensia imperturbable.
Se despide de ti aquel que te ama y te admira.

No hay comentarios: